martes, 30 de noviembre de 2010

Mientras duerme el tiburón

     A veces no es tan fácil encontrar tu sitio en un mundo donde todo se presupone, donde cada persona interpreta un papel, elegido o no. A veces la presión es demasiado fuerte y la caída es inevitable.

     Mientras duerme el tiburón es el título de un libro que me leí hace tiempo. Trata de una familia en la que cada uno tiene sus inquietudes y problemas, y aunque tienen una forma de ser muy diferente, tienen algo en común: son un mundo de gente incompleta. ¿Y quién no forma parte de ese mundo si la completitud es efímera, un momento de lucidez, un destello en la oscuridad, un truco de marketing o una película con happy ending?

    Todos ellos viven en el vientre del tiburón, metafóricamente hablando, y deben  salir cuando el tiburón esté dormido, pero si estás dentro en su vientre ¿cómo vas a saber si duerme o no? El vientre del tiburón son las cadenas que nos ponemos nosotros mismos, lo que nos agobia y nos preocupa, lo que impide que seamos felices. El tiburón siempre duerme o siempre está despierto según te lo plantees, porque el tiburón duerme en el momento en el que decides luchar e intentar salir adelante .



     La novela como la vida tiene partes emotivas así como otras difíciles de digerir. Me hizo pensar en el tic tac del reloj,ese reloj que se pone en marcha cuando todo parece que va bien, el tic tac te recuerda que cada minuto que pasa es un minuto menos que te queda, que la burbuja de aparente estabilidad en la que vives se puede romper en cualquier momento.

    Hablando de estabilidad hay un fragmento que habla precisamente de ella "para nosotros la estabilidad es estarse quieto. Sin embargo, ser estables significa ser estables en movimiento"  creo que tiene razón, que una vez que conseguimos lo que queremos dejamos de luchar y terminamos perdiéndolo todo, es una forma sutil de decir que si quieres conservar lo que tienes,  has de seguir esforzándote.  

jueves, 25 de noviembre de 2010

Sólo el humo (significado)

    La verdad es que, a veces me da por escribir en chino siendo castellano,  es decir,  que ni yo misma me entiendo, por lo menos al principio, hasta que me paro a analizarlo y entonces saco algo en claro. Bueno, creo que lo que quería transmitir era esto:
    Me gustaría quedarme en tus zapatos y no despegarme del suelo quiere decir que me gustaría que nada cambiara. Olvidar los vuelos siderales de aquellos sueños no compartidos significa dejar a un lado los idealismos, pero no sólo los nuestros, sino los de los demás, de ahí que son no compartidos. Sólo el humo de los sueños en mis deseos muestra que es imposible, que la idea de buscar la perfección se cuela como el humo tras el incendio dentro de nuestros deseos, es decir, que seguimos construyendo utopías aunque sólo sea en nuestra imaginación.  

martes, 23 de noviembre de 2010

Sólo el humo

   Me gustaría quedarme en tus zapatos y no despegarme del suelo. Olvidar los vuelos siderales de aquellos universos no compartidos. Sólo el humo de los sueños en mis deseos.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Atravesando los montes



Siempre las subidas cuestan más que las bajadas, sin embargo hay más peligro al bajar que al subir, las piedras del camino siempre engañan y caerse es relativamente fácil. Todo no son risas,  pero, aún así, merece la pena, espero.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Dicen

Dicen que quien mucho abarca poco aprieta. Tengo el blog abandonado y quiero hacer muchas más cosas de las que hago y me administro el cansancio muy mal.

martes, 9 de noviembre de 2010

¿Valientes?



"A veces me despierto sin querer
Puedo verte cuando no me ves
dormida a mi lado
Y me apoyo en tu corazón
y te canto en una canción
lo que nunca te digo


Si pudiera abrazarte
tan fuerte
Consiguiera quedarme
dentro para siempre


Moriría por ti
Moriría por ti
Como mueren los valientes


A veces me quiero despertar
necesito oírte respirar
para sentirme vivo


Y hago surcos por el edredón
como un rompehielos que va
escribiendo en el ártico


Si pudiera explicarte todos mis silencios
sólo son laberintos en los que te pierdo


Viviría por ti
Viviría por ti
Como viven los valientes"

Nada es sencillo



"Y si todo va tan bien, si todo es tan sencillo"...

No, nos engañemos, nada es sencillo. Nada es fácil desde que dejamos el colegio. Olvidamos los círculos, los cuadrados y los rombos. Algunas de esas figuras se convirtieron en estrellas, pero la mayoría de ellas son ahora espirales.  ¿Y si el límite tiende a cero y no a infinito? ¿Y si la montaña es demasiado alta y no somos alpinistas? ¿Y si?...

jueves, 4 de noviembre de 2010

Huida a tiempo



    Huimos del miedo(siempre), de la soledad(depende del momento), de aquello que buscamos de forma inconsciente(puntos suspensivos), del cansancio que nos pisa los talones(sin comentarios),  de las horas inevitables¨(sólo por la mañana y entre semana), de las preocupaciones( no podemos escapar de nosotros mismos) de los segundos muertos (con todo lo que hay por hacer!), de nuestra propia sombra(nos perseguirá allí donde vayamos)


      Mientras miramos el mar, la playa vacía, el frío de un invierno gélido, nos preguntamos si el barco ha llegado a tierra firme en plena tempestad. Más allá de las preguntas etéreas de los días venideros está el presente(de hecho, es lo único que tenemos)

     Siempre andamos por arenas movedizas (el terreno del ayer que todavía es hoy), ese tiempo que nos hizo caer enfermos de felicidad y que nos retuerce en las esquinas de la inseguridad, el temor de que todo desaparezca, de que la nada vuelva a ser nada y la materia se desintegre .  Bueno,  miedo al fin y al cabo, así que ya podemos empezar a correr, como los del vídeo de Editors, y cuidado que cojo el cronómetro!

lunes, 1 de noviembre de 2010

Las grietas del infierno



    No sé cómo empezar a hablar de Las grietas del infierno de Rubén Castillo, y más habiendo leído reseñas como ésta o como ésta .

   La verdad es que está muy bien escrito, no es monótono, aborda muchos puntos de vista, e implica al lector como pocos libros lo consiguen.

   Leyendo la novela sientes la impotencia de ver que no puedes pelearte con todos los compañeros de Pablo y llamarles a todos hijos de mala madre.

   ¿Pero cuál es la verdad en un mundo donde gobierna la mentira por mayoría absoluta? Si todos han probado el fruto del pecado, si tienen las manos atadas por su mala conciencia y si, como dice el refrán, piensa el ladrón que todos son de su condición, cómo podrán ponerse del lado de la verdad sin salir perjudicados.

   Navegamos en un mar de dudas, aunque lo que sí que está claro es que ella tiene más de 18 años y que a Pablo se le acusa de algo que no está demostrado.

   ¿Pero realmente llegó a pasar algo entre Pablo y Sonia? Seguramente nunca lo sabremos, cada uno puede pensar lo que le parezca.

   En mi opinión pudo ser incluso ella quien pretendiera abusar de él con el pretexto de cambiar su suspenso por un aprobado, o que quisiera que él dejase a su mujer, el dijera que no, y a partir de ahí ella decidiera hacerle la vida imposible ... ¿Pero entonces por qué él no la acusa a ella? tal vez porque las cosas no son ni blancas ni negras son grises.

   Lamentablemente la igualdad no existe, por mucho que se empeñen en poner un ministerio de (des)igualdad (que no hace más que desequilibrar la balanza y vaciar el bolsillo de los contribuyentes) ¿qué pasa, que no hay maltratadoras?,¿no hay mujeres más venenosas que las serpientes?

   Sinceramente en dos días no se superan las faltas de ortografía, además si ella creía que iba a suspender por qué no le dijo al profesor que le hiciera el examen escrito, que no me lo creo, que se ve venir que hay gato encerrado.

    Lo que  sí que no me entra en la cabeza, de ninguna manera, es cómo se le puede dar tanto crédito al testimonio de una alumna y no concederle ni siquiera el beneficio de la duda al acusado.

    Pero es que lo peor es que estas cosas pasan en la realidad y el profesor siempre tiene todas las de perder, aunque no haya roto un plato en su vida.

    Y lo que hace la inmensa mayoría es mirar hacia otro lado, y que no les manchen los zapatos y eso en el mejor de los casos, porque en el peor, se dedican, además, a manchar los zapatos de los demás.