domingo, 20 de diciembre de 2009

Alberto Durero

Hace unos años estuve en una exposición de Alberto Durero, me gustó mucho. Como no me voy a poner a hablar de todos los cuadros por razones obvias de tiempo y espacio pongo sólo tres.

Empezamos con Liebre, portada del catálogo(año 2005). No se aprecia bien en la imagen pero es una preciosidad de un realismo impactante.La libre en apariencia está en posición de reposo , pero si nos fijamos en los ojos, en realidad está inquieta, parece que va a saltar de un momento a otro.

Seguimos con Ala de una carraca muerta, representa una parte de la naturaleza del todo en el sentido de la corografía de Ptolomeo.


Terminamos con La calumnia de Apeles. Muestra a un juez sentado en su sillón, con orejas de burro, al estilo rey Midas, simbolizando su estupidez, a su lado unas falsas consejeras personifican la ignorancia y la sospecha. La calumnia, tiene agarrado al inocente por los pelos, éste implora clemencia con los brazos alzados, detrás vemos a la envidia, la insidia y el engaño.



El siguiente grupo de tres personas es un añadido de Durero y alude a los disturbios de los campesinos de la época. Se ve a un campesino caracterizado como equivocación, su impaciente acompañante, la prisa, lo ayuda a presentar demandas ante la autoridad. Cómo estas parecen injustificadas a los ojos del Concejo entra en acción el castigo(pena) con la reluciente espada de la justicia. La figura penúltima la penitencia, vestida con harapientas ropas de luto, gira la cabeza hacia la verdad. La línea cortada del texto podría haber dicho: Nadie debería pronunciar una sentencia antes de haber analizado escrupulosamente las circunstancias.

4 comentarios:

Sarashina dijo...

Supongo que además habrás visto el maravilloso autorretrato que hay en el Prado. Es que encima de todo, era guapo de muerte, con unos pelos rizados y rubios divinos y unos ojos que enamoran. Para mí, uno de los más grandes.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Anda que tienes mal gusto tú.... jajaja

Saludos y un abrazo.

Lajarín dijo...

El ala de ave de Durero siempre me ha fascinado, tiene un contenido oculto, me da la sensación. Algo casi onírico... No sé, me gusta mucho ese cuadro...

Jaime dijo...

Deberiamos aplicarnos a nuestras vidad la última frase. Tendemos a hacer juicios de valores muy a la ligera, y no medimos lass consecuencias.