miércoles, 3 de junio de 2009
Selección natural
Silencio, ruido reparador, caminos secantes, nada es real en la soledad de la noche, luces, sólo luces, extrañas sonrisas que no se llegan a dibujar,¿por qué?, ¿por qué este calor asfixiante?,el aire traspasa voces congeladas, voces del deshielo,¿por qué dicen que los últimos serán los primeros?, la última, siempre la última. Punto. Selección natural,¿por qué no podemos decir siempre lo que pensamos?, ¿por qué desconfío hasta de mi propia sombra?, ¿por qué no puedo evitarlo?. Luces, luces, más luces.
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3 comentarios:
madre mia, si dijesemos siempre lo que pensamos no podriamos vivir en sociedad, al menos en esta sociedad que tiene un alto grado de hipocresia, asi que nuestros pensamientos se fundan en esas luces de la noche de las que hablas y no salgan malos bichos por nuestra boca
por cierto, mi sombra tampoco es muy de fiar
Y todo es mentira. Incluso las luces de neón.
Creo que lo que más mentira es precisamente son las luces de neón. No os dejéis deslumbrar. Yo soy una acérrima partidaria de hablar cuando toca y del silencio natural. Hablo mucho y mi desconfianza no existe prácticamente. Le llamo más bien intuición. Es decir, miro y a veces me digo que hay que alejarse en silencio. Casi siempre hablo, porque me sale del alma.
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